Consejos para tomar fotografías de locales cuando viajes

1 Star2 Stars3 Stars4 Stars5 Stars (No Ratings Yet)
Cargando…
por / lunes, 23 octubre 2017 / Publicado enOcio

gente-local

Cuando viajamos muchos de nosotros queremos fotografiarlo todo. Tomamos instantáneas de nuestro plato de noodles en un puesto callejero de Tailandia, de todos esos templos y playas o, también, de esa mujer cubana fumando un puro frente a una fachada de colores que evoca la Cuba con la que soñaste y la que viniste a buscar. Pero, ¿harían los cubanos lo mismo si me vieran tomando un café en Las Ramblas de Barcelona? Tan sencillo y tan complejo al mismo tiempo puede resultar el fascinante arte de la fotografía cuando hay personas de otro país de por medio. ¿Quieres saber cómo tomar fotografías a gente local cuando viajas?

Occidente ama las fotos

Cuando viajé a India por primera vez Internet no era lo que es hoy ni tampoco mi labor era la misma. Tomaba fotografías por simple inercia pero sin tampoco esmerarme en eso de los objetivos, la luz, la hora azul y los muchos conceptos que engrosan el manual del fotógrafo profesional que tampoco soy ahora (aunque lo intento). Sin embargo, durante mi último viaje a Cuba mi percepción era totalmente diferente: tenía que tomar todas las fotografías posibles, de noche, de día, de la comida, del Malecón, del plato de frijoles y sí, también de los cubanos. . . Porque lo queramos o no, la imagen del cubano frente a un Plymouth de los años 50 siempre es un buen recuerdo, trofeo, instantánea o cómo cada uno quiera llamarlo.

Concretamente, fue un día paseando por La Habana Vieja cuando me topé con una señora típicamente cubana y la descubrí tan idónea para una foto que no pude evitar preguntarle si podía hacerle una. A diferencia de otros locales que sí se mostraron más reacios en su momento, esta señora no tuvo problema, miró a un objetivo que parecía conocer demasiado, pegó una fuerte calada a su habano, y para cuando yo le di las gracias extendió su mano abierta y me dijo ” 1 CUC”. Me chocó en un primer momento, pero después se lo pagué encantado. Horas más tarde, hablando con otro viajero, éste me dijo que tomar una foto de una persona en tales circunstancias no debería costar dinero.

En principio puede parecer algo sencillo: haces una foto y la publicas, pero posiblemente eso sea porque a la inversa nunca sucede de tal manera para nosotros los occidentales, o al menos no de un modo tan obvio. Los indios, los africanos, los cubanos o los chinos no suelen tomarnos fotos a nosotros en Starbucks, mientras viajamos en el metro o de cañas con nuestros amigos cuando realmente somos igual de exóticos para ellos. Pero quizás la cosa cambiaría si me viesen con un traje de luces de torero, y el motivo sería posiblemente porque esa es la imagen de España que siempre tuvieron. ¿Cuánto hay de estereotipo y de realidad? Y una vez lo analizamos, ¿cuánto de moralidad hay en hacer una foto a una persona para después publicarla en Internet sin su consentimiento? Hay cubanos que saben esto y que también se niegan a que les tomen fotos, mientras que otros ceden sin problema. Por ese motivo, quizás la solución pase por saber cómo hacer fotografías a gente local cuando viajas.

Tal y cómo explica David Lazar en el siguiente artículo sobre tomar fotografías a locales en los viajes, existen tres formas de hacerlo sin que éste resulte un ejercicio incómodo:

  • Interactuar con un local primero antes de pedirle si puedes hacerle una fotografía. Desde el propietario de tu hostel hasta esa persona que se te acerca en la calle para charlar.
  • Si te dedicas a la fotografía de forma profesional siempre puedes pagar a personas locales que te hagan de modelos para un reportaje.
  • Fotografiar a una persona sin pedirle permiso. Arriesgado, ya que posiblemente no obtengas la mirada o reacción deseada, pero es una opción, aunque yo insisto en pedirle permiso primero.
  • Una vez que te hayas decidido por una de estas opciones añadiría dos de los muchos buenos consejos de Arturo Bullard sobre cómo tomar fotografías a gente local cuando viajas: busca mercados o fiestas locales, escenarios propiamente típicos en los que la fotografía adquiera un mayor potencial pero, especialmente, busca la naturalidad en el sujeto, pues un modelo demasiado rígido restará naturalidad al conjunto.

Pero nunca nunca se te ocurra la opción de fotografiar con flash a dos metros de distancia sin importar si acabas de darle un susto de muerte a la persona o burlas las normas del lenguaje corporal, algo que  ahora que recuerdo sí nos ocurrió en India una vez cuando en mitad de un paseo marítimo tres locales vinieron a fotografiarnos. Al parecer nuestra camiseta de tirantes era de lo más exótico que habían visto nunca.

Porque sí, quizás vaya en nuestro genes fotografiar todo aquello que sea totalmente diferente a nosotros y nuestra cultura. Pero saber cómo hacerlo siempre será mucho mejor.

¿Qué opináis sobre esto?

 

Etiquetado bajo: ,
SUBIR