Ser autónomo es una de las formas de emprender más habituales. Se trata de una modalidad fiscal y de cotización a la Seguridad Social con sus propias normas. Como propias también son las normas que tú mismo te dictas para desempeñar el trabajo y ganar el sueldo. Una forma de trabajar con sus propias ventajas e inconvenientes.

Nada más regresar de las fiestas navideñas hay que recuperar la pasión por el trabajo y las ganas de emprender. Para iniciar la agenda de eventos y actos de emprendedores se celebra en Madrid el 12 de enero la Smart Money, un encuentro entre inversores, expertos en negocios y emprendedores en los que encontrar financiación una lanzadera para iniciar la aventura del emprendimiento.

Iniciar un negocio supone metafóricamente una carrera de obstáculos que deberás superar con tus propias actitudes. La experiencia nos ha hecho recopilar diez de las actitudes mejor valoradas a la hora de crear un negocio y emprender un proyecto. Te las desgranamos a continuación esperando que las tengas todas, y si no fuera así, que puedas adquirirlas para llevar a cabo tu empresa.

Cuando se crea una empresa una de las primeras medidas a tomar es comprobar si el dominio con el que se quiere aparecer en Internet está libre. Tan importante como realizar esa comprobación es conocer si la marca o nombre comercial del negocio está registrado. Registrarlo evita problemas en el futuro y es una garantía de que nadie va a reclamar el nombre de la empresa, con lo que supone de reputación comercial.

Desde hace varios años una palabra nueva se ha implementado en nuestro vocablo diario, especialmente entre quienes desarrollamos una actividad profesional en el mundo ejecutivo: el coaching. Se trata de una serie de técnicas adquiridas mediante un proceso de entrenamiento personal por el que una persona salva la distancia que existe entre su situación actual y la meta que se propone.

Llevan algo más de un año realizando encuentros de fines de semana entre emprendedores y profesionales. Han participado 250 proyectos y se ha convertido en una cita a tener en cuenta a la hora de emprender, es Greenweekend.

Mucho dista la educación que se recibía en las universidades que habrían sus puertas en el siglo XVI a la que se recibe hoy en día. Sin entrar en la calidad, que es agua de otro costal, sí que los alumnos tienen una mayor oferta educativa y más variedad de formas de estudiar hoy en día. La formación online está ganando adeptos en la última década. En España fueron pioneros centros de enseñanza como CEAC (Centro de educación de aparejadores por correspondencia), y con la llegada de las nuevas tecnologías este fenómeno se ha popularizado ofreciendo alternativas eficaces de estudio.

“Emprender”, una sencilla palabra de la que se han escrito miles de libros. Hoy nos vamos a fijar en uno de ellos: “Los 10 mandamientos del emprendedor”, escrito por Antonio Manzanera, autor de un libro de éxito “Finanzas para emprendedores”. Tras la primera obra, un libro técnico sobre cómo encontrar financiación para emprender, ahora Manzanera crea una segunda parte, un libro mucho más cómodo de leer e igualmente interesante que se fija en el proceso de emprender o una vez que se tiene la financiación y la idea de empresa está clara en la mente. Este libro está escrito pensando no cualquier tipo de empresa, sino en las startups, atendiendo a sus peculiaridades.

Los planes universitarios de una u otra forma responden a las exigencias del mercado, sin embargo, la formación llega a ser genérica y en ocasiones enclaustrada en el tiempo. Gracias a los postgrados y másteres las universidades logran dar una respuesta más adecuada a las demandas de las empresas, si bien siguen pecando de generalización. La alternativa a esta falta de especificación que sí buscan las empresas se puede encontrar en las escuelas de negocio.

Tener una carrera universitaria no garantiza un puesto de trabajo. La formación, siendo un pilar fundamental en el entorno laboral actual, no es una cuestión determinante para obtener un empleo. Si bien es cierto que los titulados universitarios suelen tener un espíritu emprendedor capaz de lanzarlos a iniciar la aventura empresarial por su cuenta y riesgo, esta cuestión es más un actitud que una derivación de la formación. La universidad configura a personas de gran capacitación, pero escasa experiencia. Por contra, muchas empresas están apostando por contratar a personal procedente de la Formación profesional, habiendo algunas ramas concretas donde la oferta de empleo es mayor.